Superficie | 50m²
Año | 2015
Ciudad | Sant cugat del Vallés
Fotógrafo | Mauricio Fuertes
El encargo constitió en convertir un local de antiguas oficinas de 50m2 en una clínica dental que tenía que tener una pequeña recepción, 2 boxes, un despacho privado, baño y laboratorio. Se quería ganar luz natural y amplitud para hacer el espacio de trabajo mucho más cómodo y fácil de usar tanto para los doctores como para los pacientes. Se diseñó un espacio muy blanco, de estilo claramente nórdico, que trasmitiera una sensación de pulcritud, higiene y serenidad (tan necesaria en una clínica dental) y a la vez que la luz natural se filtrara por todos los espacios. Las divisiones de los boxes se hicieron de pared de obra y las paredes que dan a la recepción y sala de espera se diseñaron con una carpintería de madera blanca y vidrio transparente para conectar la luz natural desde los ventanales hasta la zona interior más cerrada. Para conseguir privacidad en los boxes, se colocaron unas cortinas de lamas de madera orientables lacadas en blanco, jugando con la transpariencia y la opacidad, y cuando las cortinas están entreabiertas, se crea un interesante juego de luz y sombra que recuerda un espacio japonés. En el resto de paredes se aplicó un papel blanco vinílico con textura de rallas verticales que potenciaba la luz y que a la vez funcionaba muy bien para limpiar y para transmitir sensación de pulcritud.